lunes, 10 de diciembre de 2007

De madrugada...

Acabo de salir al patio… hace frío, pero es un frío agradable… ese frío que puedes sentir hasta sin ropa y no lo desprecias… ese frío que sólo existe en esas noches de verano y primavera…

Miro al cielo… esas estrellas… tan hermosas… camino lentamente, como si caminara a la orilla del mar, mirando al cielo.. lo disfruto… disfruto esos breves pasos… doy vueltas… como una niña que conoce por primera vez un lugar maravilloso… como el cielo de noche mirado desde el patio de mi casa…

Pienso en ti… en lo feliz que me haces sin siquiera saber lo que siento… pero prefiero que sea así… prefiero que no lo sepas, y que me sigas haciendo tan feliz como ahora… te quiero… me gustaría hacerte tan feliz como tú me haces serlo… lo intento día a día, y al parecer lo estoy logrando… me encanta saber que al menos se esboza en tus labios una sonrisa cuando hablamos… esa sonrisa tan bella…

Recuerdo la primera vez que te vi… tan niño, tan adolescente...

se acerca mi perro… mi enano, cada vez más tierno… me muestra su pelota… lo miro: “estás viejo para estas cosas!!” . me mira y mueve la cola. Con las manos tomadas atrás y el pie en punta, como si estuviera bailando, empujo suavemente la pelota… me siento bien al hacerlo, me gusta saber que puedo poner de esa forma el pie, y aunque no esté en alguna competencia, aunque no esté en alguna selección, me gusta saber que puedo hacerlo, puedo bailar y moverme de una forma que muchos envidiarían…

puedo sentir cosas que muchos envidiarían sentir…

Puedo quererte, y, sin ser correspondida, no sentirme triste por eso… muy por el contrario, estoy feliz… feliz de quererte, y que no lo sepas… es mi pequeño secreto...

la pelota se aleja un poco… él la toma en un segundo, y vuelve a dejarla en mis pies. Sonrío, y vuelvo a empujarla… la vuelve a tomar… le acaricio la cabeza, y , dando un salto desde el pasto al ventanal, entro a la casa… me siento frente al computador, tomo el teclado entre mis manos, y comienzo a escribir…

está listo… inicio una sesión, publico la entrada, y aquí está…

para ti,

mi querido amigo…